#ElPerúQueQueremos

Mi experiencia en Panamericana

Publicado: 2009-06-08

Me incorporé a Panamericana Televisión a fines del año pasado y asumí la conducción de 24 Horas, Edición Central el 1 de Enero de este año. A lo largo de este periodo he podido desarrollar mi trabajo con el mayor grado de profesionalismo de la mano de un equipo que, en general, me brindó su apoyo y del que hoy, a pesar de los últimos incidentes, me siento agradecido.

El viernes se produjeron hechos que condeno y lamento. A unas declaraciones inoportunas de mi parte sobre la situación del canal se sumó una reacción desproporcionada y violenta de parte de algunos trabajadores.

Sin perjuicio de que mis declaraciones (brindadas a título personal a CPN y reproducidas en otros medios) fueron sacadas de contexto y mutiladas, debo reconocer que -por la forma en la que aparecieron publicadas- pudieron causar malestar entre algunos trabajadores en momentos de mucha tensión.

Al respecto, quiero desde mi blog, en primer lugar, expresar mis disculpas a quienes, trabajadores o ex trabajadores del canal, se pudieron haber sentido ofendidos por las mismas. Que quede claro que nunca quise que se pensara que no me interesa que el canal cumpla, como corresponde, con sus obligaciones. Debo precisar también que en ningún momento afirmé ser vocero de los trabajadores de Panam ni Pantel ni que los pagos en el canal se encontrasen al día, sino todo lo contrario. He expresado que -a la luz de lo que yo pude ver- siempre se producían retrasos en los pagos y ahí está la versión magnetofónica de CPN como prueba.

Quiero que se sepa que comparto la posición de quienes reclaman por el cumplimiento de sus derechos, pero condeno los actos de violencia. Pienso que uno no debe aceptar maltratos de nadie. Es en ese sentido que considero (y eso fue lo que dije) que si a uno no le pagan y, por ende, no lo respetan, no tiene por qué seguir (ni debería seguir) laborando en una empresa. Es más, pienso que es un error continuar por mucho tiempo ya que eso avala al empleador incumplido. Debe, por el contrario, exigir ante todas las instancias que se atiendan sus derechos y buscarse un trabajo en el que sí lo valoren y respeten. Eso es lo que en teoría debe funcionar. Lo que ocurre es que la situación y realidad de cada trabajador y colaborador es distinta y uno no debe generalizar. Hay gente que lleva años de maltratos y, a pesar de los mismos, inexplicablemente, continúa laborando, tal vez con la esperanza de que las cosas -con el tiempo- mejorarán para ellos. Eso es algo que, por absurdo que parezca, uno debe respetar.

Quiero reafirmar algo de lo que son testigos quienes tuvieron la ocasión de tratar conmigo profesionalmente: Mi accionar siempre estuvo basado en la buena fe y busqué colaborar con el canal, manteniéndome al margen de las disputas societarias, a fin de que el canal se pudiese mantener a flote, sobre todo en los últimos días. Creo haber destacado siempre el compromiso de la gente con su centro de trabajo y haber soportado actitudes poco caballerosas de ciertas personas.

Estoy seguro que los hechos violentos que se produjeron el viernes por la noche dentro del canal no representan el pensamiento mayoritario del personal de la empresa ni el de sus ejecutivos. Lo cierto es que el episodio del viernes me hizo recordar Animal Farm ("Rebelión en la granja" de George Orwell), donde los cerdos, luego de hacerse del control de la granja del señor Jones, instauran un sistema de gobierno injusto y abusivo. Yo ya di por superado el incidente producido el viernes y ahora solamente deseo que el canal supere de una vez por todas los problemas por los que atraviesa.

A pesar de no haber tenido mucho tiempo en el canal (lo que no me da menos derechos que a los que tienen años en él), pero al mismo tiempo, por haber sido el encargado de presentar su principal informativo en los últimos tiempos, no puedo sino compartir el sentimiento de la mayoría de trabajadores y ex trabajadores de Panamericana, que lo único que desean es que la empresa salga adelante y que se les pague lo que se les adeuda.

Yo soy respetuoso del estado de derecho y espero que quienes incansablemente estuvieron reclamando por el fiel cumplimiento de los compromisos y los acuerdos con los trabajadores, hoy sean consecuentes con su predicamento sin distingos de ningún tipo.


Escrito por

morey

Abogado y Media MBA Presidente de Matrix Corporation Editor General de RBC Columnista del Diario Correo


Publicado en

El blog de Luis Alfonso Morey

Análisis y opinión sobre temas de actualidad